Anabella y la sociedad
Si hay algo que
me gusta hacer es poder relacionar un libro, articulo o texto con otro. El año
pasado cursé la materia sociología en la UBA y nos dieron un texto que mientras leía se me
vino a la mente el cuento de Benito Taibo “Anabella
y la Bestia”. Este cuento fue uno de mis favoritos por el trasfondo que
tiene además de la historia en general. Mi intención en este post es analizar y
establecer una relación del cuento con el texto “Estructura social y anomía” de Robert. K Mentón. Como todo
análisis necesito explicar partes de la historia para poder establecer la
relación con el texto por lo que va a contener spoilers.
Lo que voy a
escribir a continuación no es crítica negativa a la sociedad sino divisar esos
aspectos que, aunque sabemos que existen, no lo ponemos en palabras ni lo
traemos a la superficie para hacerlos conscientes.
En su artículo, Merton
nos explica que la sociedad o estructura
social tiene distintas características, elementos. El primero y, el único
que voy a considerar en este análisis, consiste en los objetivos o propósitos a los que aspira la sociedad y que están aceptados
por ella. Entre esos objetivos, el de mayor prestigio es el “éxito monetario”.
A la sociedad no le importa cómo se alcance ese éxito (ya sea de forma lícita o
abusando del poder) sino conseguirlo ya que sólo el resultado produce satisfacción. El dinero pasa a
convertirse en el mayor símbolo de prestigio por el que todos estudiamos o
trabajamos para, en el futuro poder gozar de un bienestar económico. Pero
¿Quiénes son los encargados de transmitir estos valores?
Los padres, la
escuela y el trabajo son los que se ocupan de inducir esos fines (de alcanzar
el éxito) y disciplinar a las personas para que mantenga sus aspiraciones altas
de que sí se puede conseguir. Siempre y cuando se tenga los talentos
necesarios. Es decir, esforzarse lo suficiente. Un ejemplo de esta presión
ejercida por la sociedad para obtener el éxito es cuando escuchamos o leemos la
historia de una persona que, no teniendo nada, pudo llegar a la cima y solo
esforzándose lo suficiente para destacar. Sin embargo, no nos damos cuenta que
se necesita más que eso. También depende de otros factores como la suerte.
Además, la cultura pide que los individuos orienten su conducta hacia la perspectiva de la gran
riqueza pero, por otra parte, se le niegan oportunidades para hacerlo
lícitamente
En el cuento de
Benito, la madre de la protagonista es esa sociedad
que presiona a Anabella para alcanzar el objetivo. Esta meta es la de lograr el
sueño americano y para eso tiene que cruzar la frontera ya que la
conducirá al éxito monetario si trabaja en los Estado Unidos. Nuestra
protagonista es “entrenada” desde chica por su madre, Florinda, quien
le enseña y transmite que eso es lo que tiene que hacer. “La educación lleva a
la inteligencia y ,en consecuencia, al trabajo y al éxito monetario” son unas de las frases que acostumbramos a oír.
La presión
constante para conservar esa ambición fluye de la madre hacia la hija. La sociedad es la
que influye a ciertas personas para que sigan conductas inconformistas más que
una conformista, es decir que con tal de lograr ese éxito lleva al individuo a
hacer cosas que no le terminen de agradar. Anabella, lo siente como un deber
más que un sueño y pone todas sus fuerzas para lograr ser la mejor. Merton, el escritor de este artículo, describe que los individuos van a concentrar todas sus emociones para alcanzar
esos fines.
Robert Merton
hace una clasificación de como las personas se adaptan a la sociedad portadora
de estos valores. El quinto modo de adaptación llamado “Rebelión” es la persona
que le da igual aspirar al éxito y quiere inculcar otro tipo de valores. Aurelio personifica este modo y es el
responsable de que Bella baje sus ambiciones y no lo intente más.
Cuando aparece
Aurelio en la vida de Bella, la madre la castiga. Esto se debe a que todas sus energías ya no están puestas en la meta. Para la madre (la sociedad) es visto como una amenaza. Merton expone que el delito no es el fracaso sino
dejar de intentarlo. Bella, después de conocer a Aurelio, en la categoría hecha
por Merton, correspondería a la tercera clasificación denominada “Ritualismo”
porque a pesar de que baja sus ambiciones todavía es consciente de lo que debería
hacer. Aunque lo haya dejado de lado, sigue sintiendo esa presión de la sociedad
que la empuja a alcanzar la meta. Por lo tanto Aurelio es el interruptor que
saca a Bella de su meta (o más bien de la madre) Y es que la sociedad
ve como rebeldes a los que no se interesan en conseguirlo y culpables a los
individuos que no pueden alcanzarlo, con la excusa de que no lo intentaron
suficiente.
Luego de unos
incidentes, Bella sigue su camino y en su travesía llega el momento por el cual
había puesto todo su esfuerzo. Su madre la había entrenado para nadar en el río
y así llegar a la frontera. Por lo que Bella pensó que al cruzarlo ya estaría
salvada. Sin embargo, se encuentra con que no hay tal río sino un
desierto. Esto simboliza las trabas que
se nos presentan en el camino al éxito. Lo que para Bella iba a parecer fácil
resulta que nadie la previno para enfrentar ese obstáculo. Se encuentra en la
nada misma, literalmente. Antes del río, el tren en el que viaja Bella,
conocido como La Bestia, representa
un lugar de pura competencia. Los pasajeros no ayudan a otros (solo algunos)
sino que compiten entre sí para lograr llegar vivos al otro lado. Como explica Merton “La importancia concedida
al resultado deriva en una actividad competitiva”.
Alcanzar la meta
es sinónimo de felicidad para la sociedad. Pero Benito nos demuestra lo
contrario en su narración. Es por esto que considero a este cuento una
genialidad. Se esperaría un final donde Anabella pueda alcanzar, por fin, ese
éxito monetario al cruzar la frontera de EEUU y salir de la pobreza. Sin
embargo, no es así porque la protagonista se da cuenta de que prefiere una vida
austera sin grandes cosas materiales y con las que pueda vivir en paz. Bella es
una trasgresora que rompe con esta estructura que espera la sociedad de los
individuos y decide hacer lo que en verdad quiere. Así Benito Taibo hace
evidente que el éxito monetario no es igual a felicidad.
En conclusión,
esta relación entre el cuento y el artículo no es para deducir que la madre es
una persona malvada por obligar a su hija ni que las personas a bordo del tren
también lo sean. De hecho Anabella se encuentra con personas que la ayudan y eso demuestra que Benito cree en una sociedad donde no todos compiten y existe el compañerismo y la bondad. Además, no tiene nada de malo querer tener éxito. Este pequeño análisis es sólo una
forma de dar cuenta de cómo funciona la sociedad en la que estamos inmersos.
Nicole Soto
Hola, te sigo. Soy de la iniciativa blogs asociados.
ResponderEliminarMe gusta tu blog!! Un saludo
me gustó mucho, gracias a ti coprendi cosas que pase por alto .
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